2b87d7e2-36f3-44bb-97e8-36e88b5d9e46

facebook
instagram
linkedin
youtube
Links:

Correo electrónico:

Síguenos en:

Inicio
Contactos
Centros Internacionales

info@scala-mss.net


facebook
instagram
linkedin
youtube
2b87d7e2-36f3-44bb-97e8-36e88b5d9e46

facebook
instagram
linkedin
youtube

© Misioneras Seculares Scalabrinianas - 2022

Privacy & Cookies Policy.

Ven, Esperanza del mundo

2025-03-18 17:55

Array() no author 89281

Iglesia-Fe, giubileo-speranza-annosanto-pellegrinidisperanza,

Ven, Esperanza del mundo

‘La esperanza no defrauda’, es el mensaje central del Jubileo. La vida cristiana es un camino, se avanza paso a paso, y el camino “necesita an

Spes non confundit, ‘La esperanza no defrauda’. Este es el título de la Bula de Convocatoria del Jubileo de 2025 difundida por el Papa Francisco. La esperanza es el mensaje central del Jubileo.
El tema de la esperanza me remite al pasaje de los discípulos de Emaús, en particular a sus palabras dirigidas al misterioso peregrino que camina junto a ellos: “Nosotros esperábamos que él fuera el que iba a liberar a Israel…” (Lc 24,21). Los dos se alejan de Jerusalén desilusionados y amargados por la aparente derrota de aquel a quien creían el Mesías. Están desanimados porque no logran interpretar lo que está sucediendo. Tenían en mente solo su interpretación de los hechos, no estaban dispuestos a cambiar de punto de vista, a dejarse dar la vuelta.


¿Cuántas veces nos ha pasado también a nosotros? ¿Cuántas veces también nosotros hemos dicho: esperábamos que esta situación fuera así, esperábamos que se abriera esta posibilidad, esperábamos que este problema se resolviera… y en cambio llega la desilusión (a menudo ligada a una ilusión previa) y vemos todo negro, incluso donde no todo es negro.


En estas situaciones necesitamos a alguien que se acerque y camine a nuestro lado, que nos indique la fuente cierta de la esperanza, la Palabra de Dios, que nos haga encontrarnos con Aquel que es la Palabra. Solo así podemos reencontrar la Esperanza, que “no es solo un pensamiento positivo. Nuestra esperanza tiene un nombre, se basa en nuestra fe en Jesucristo. No es algo, sino Alguien” ha afirmado el Obispo auxiliar Birkhofer.


Cuando al recitar el Credo decimos: “Creo en Dios, Padre todopoderoso, creador del cielo y de la tierra y en Jesucristo, Su único Hijo, nuestro Señor” afirmamos que en Jesús podemos tener acceso directo al Padre, en Él podemos llegar a ser hijos en el Hijo. 
¿Cómo cambia esta realidad nuestra vida? ¿Cómo se conecta esto con nuestra esperanza? Si creemos en un Dios que es Padre, entonces podemos creer sin dudar que la vida de cada uno de nosotros tiene un buen origen, y que no nos equivocamos si seguimos esperando. Solo los cristianos llaman a Dios Padre, es decir, solo gracias a Jesús es posible conocer a Dios de esta manera. Y solo gracias a Jesús es posible llegar a ser hijos de este Padre. Si realmente entendiéramos profundamente lo que esto significa para nuestra vida, todo cambiaría…


Nuestra esperanza se basa en una promesa que nos hacen el Padre y el Hijo. La promesa no es que todo irá bien, que no habrá momentos difíciles, de crisis, de dolor. La promesa es la del Espíritu Santo, el Don de los dones, Aquel que nos regala la postura justa con la que estar en las diferentes situaciones, la mirada justa, que nos muestra las elecciones a tomar. Y nos hace inesperadamente fecundos.


La vida cristiana es un camino, se avanza paso a paso, y el camino “también necesita momentos fuertes para nutrir y robustecer la esperanza”, escribe el Papa Francisco.
En este año habrá, para cada uno de nosotros, personal y comunitariamente, diferentes momentos fuertes. Y cada uno podrá elegir si y cómo reconocerlos, cómo vivirlos, cómo aprovechar estas grandes ocasiones, sean especiales o estén escondidas en una cotidianidad aparentemente ordinaria.


Las experiencias que algunos jóvenes comparten en nuestra revista pueden ser también consideradas ‘momentos fuertes’ que alimentan la esperanza tanto de quien se pone en camino para encontrar como de quien es encontrado. El encuentro con cada otro diferente de uno mismo es también encuentro con el Otro y con el Más Allá. “La esperanza no vive de grandes libros, de artículos y así sucesivamente… vive de encuentros... vive del testimonio. Necesitamos raíces de esperanza que nos hablen de lo que nos anima y nos da confianza, incluso en los pequeños pasos. Como cristianos estamos en camino para mejorar este mundo, que está en desorden” ha subrayado el obispo Birkhofer.


Como hijos en el Hijo, peregrinos de esperanza, podemos entonces invocar:

Ven, esperanza del mundo, … Haz de nosotros prisioneros de la esperanza: y que toda nuestra vida salga a tu encuentro con signos inequívocos de espera.


Giulia


* Revista Por los caminos del éxodo 2024 n.4 (Leggi tutto)

*Artículo en español Por los caminos del éxodo 2024 n.2 (Leer revista)

eyJpdCI6IiJ9
Enlaces:

Correo electrónico:

Síguenos en:

Inicio
Contactos
Centros Internacionales

info@scala-mss.net


facebook
instagram
linkedin
youtube

© Misioneras Seculares Scalabrinianas - 2022

Privacy & Cookies Policy.